Informe
A LA VIOLENCIA NI CABIDA
Diagnóstico y propuestas para una ciudad con derechos
Desde las grandes movilizaciones del NI UNA MENOS, tanto a nivel nacional como a nivel provincial y municipal, se intentó de alguna manera dar diversas respuestas al reclamo de la erradicación de la violencia de género, por ahora de manera muy insuficiente. A las falencias que ya existían, la llegada a la presidencia de la alianza Cambiemos empeoró las perspectivas dramáticamente.
La violencia de género es una problemática estructural que requiere políticas integrales. Es imposible que una mujer pueda prevenir y/o salir de una situación de violencia si no dispone de recursos para construir una vida autónoma e independiente. Cuando las políticas en este sentido son parciales y fragmentadas, y encima se le suman los tarifazos, la inflación y los problemas de desempleo, la situación se complica mucho más. Claramente se necesitan refugios y centros de atención para hacer frente a las emergencias, pero también otros recursos y políticas públicas que permitan trabajar en la conciencia social de la problemática, la prevención y sobre todo en la posibilidad de que las mujeres cuenten con recursos para construir una vida con derechos.